Hace ya más de dos años que Workcase abrió sus puertas. En este tiempo, el  coworking se ha consolidado en todo el mundo y ya casi nadie se sorprende cuando hablas de trabajo colaborativo o de comunidades virtuales. Aprovechando el inicio de esta tercera temporada, hoy charlamos con el gestor de Workcase, Juan Luís Blanco, sobre cómo ha evolucionado el espacio y cómo ve él el futuro del coworking.

Empecemos hablando del presente, ¿qué destacarías de Workcase a día de hoy?  

Es un momento muy bueno para el espacio. Y no solo por la ocupación, que afortunadamente es bastante alta y con una comunidad de coworkers muy estable. Lo más importante para mí es que después de casi tres años el espacio tiene IDENTIDAD. Cuando abres un espacio, todo se basa en una idea que tienes en la   cabeza. Han sido las personas que han pasado por aquí en este tiempo las que han determinado qué es Workcase y hacia quién nos dirigimos. Precisamente para reflejar esta identidad, acabamos de rediseñar nuestra web con un enfoque mucho más visual y directo. Como gestor, la gran ventaja que le veo al coworking es justamente esto: estás en contacto permanente con los usuarios, convives con ellos y tienes una visión muy clara de qué funciona y qué no.

¿Qué proyectos has puesto en marcha y qué tienes pensado para los próximos meses? 

El plan de Cowork&House ha tenido muy buena aceptación y lo mantendremos esta temporada. Hace poco hemos abierto también un segundo local de Workcase, muy cerca del espacio principal, que está ya ocupado y a pleno funcionamiento. De cara al futuro, mi prioridad va a ser tratar de personalizar el servicio para cada coworker. Tendré una entrevista individual para saber qué puede ofrecerles el espacio más allá de los recursos básicos. Por ejemplo, para establecer colaboraciones, impulsar proyectos conjuntos o poner el espacio a su disposición en momentos puntuales que lo requieran. Es algo que ya he hecho en muchas ocasiones y que los coworkers agradecen mucho. Las normas, en una comunidad como la nuestra en la   que hemos llegado a ser casi 40 personas, son muy necesarias. Pero hay momentos en los que el usuario puede necesitar un empuje especial y mi intención es estar siempre abierto a escuchar a los coworkers y, en la medida de mis posibilidades, echarles la mano que necesitan.

Y para cerrar, ¿te atreves a hacer un diagnóstico del coworking en España? 

Han pasado ya varios años desde que abrieron los primeros centros de coworking y en casi todas las ciudades podemos encontrar una amplia oferta de espacios registrados como coworking. Aunque no tengo todo el tiempo que desearía para conocer en detalle lo que están haciendo otros espacios, sé que hay una gran variedad de estilos   y tamaños. Me parece fantástico que exista esta variedad para el usuario. Sin embargo, es lamentable cómo utilizan el nombre de coworking locales que están muy lejos de acercarse a este concepto. Muchos usuarios desconocen todavía qué es realmente el coworking, de ahí la burbuja que se ha producido estos años, con locales intentando dar gato por liebre y usuarios que no son conscientes de las posibilidades que les ofrece un verdadero espacio de coworking. Recomiendo a quien decida trabajar en un coworking que visite varios espacios, compare y descubra cuál es el que mejor se adapta a su situación.